La Aerotermia es una de las energías renovables y limpias menos conocida. Quizá porque aún no se ha desarrollado lo suficiente. Pero sin duda, cuenta con algunas ventajas la principal, que hay aire en todas partes y en el aire hay energía.
Con la aerotermia, se puede captar esta energía gratuita y utilizarla para calentar una vivienda. Para ello, se utiliza un sistema de traspaso compuesto por dos elementos: una unidad exterior que capta las calorías, y una unidad interior que se las traspasa a un circuito de agua de tipo «calefacción central». Del transporte de estas calorías se encarga un fluido refrigerante que circula entre ambas unidades y que está impulsado por un compresor. Únicamente hay que pagar por la energía que consumen este compresor y el ventilador exterior. Según sea la temperatura exterior, esta energía sólo supone entre un 25 % y un 50 % de la potencia de calefacción propagada a la vivienda, lo que equivale a decir que, entre un 50 % y un 75 % de la energía utilizada para calentar es gratuita, ya que sale de esa enorme reserva que es el aire exterior.
Según la temperatura exterior, la energía requerida supone un gasto de entre el 25 y el 50 % de la potencia de calefacción propagada. Es decir, que, como mínimo, la mitad de la energía será gratuita.
Amortización: Este concepto debe ser analizado con mayor profundidad, pues parece que una amortización corta es lo único que importa y, si, es así siempre y cuando se esté comparando alternativas con una calidad similar y una vida útil similar, pues de lo contrario corremos el riesgo, buscando una rápida amortización, de invertir menos invirtiendo en material de menor calidad y por tanto menor vida útil.
Una energía inagotable y gratuita que presenta muchas ventajas:
- Es una energía natural, renovable e inagotable.
- No contamina.
- Alta rentabilidad: hasta un 75% de ahorro en la factura de la luz.
- Adaptable a casi todas las zonas climáticas del mundo.
- Se puede usar para calefacción, refrigeración y para la producción de agua caliente sanitaria (ACS).
Incluso en pleno invierno, el aire contiene calorías. Para que el aire no contuviera nada de calor, tendría que estar a una temperatura de cero absoluto . En teoría, esto significa que se le pueden extraer calorías hasta ese límite extremo. Incluso el coste de los equipos es relativamente barato comparándola con la Geotermia